De manera compartida las estudiantes Ángeles Soto y Luciana Martinez, junto a Ivan Molina y Alexis Casco formulan una explicación de por qué podemos ser de dicha manera.
Podemos ser de dicha manera porque nuestras actitudes están definidas por dos factores que se complementan unas con respecto a la otra; estos dos factores son las capacidades innatas o biológicas y las adquiridas social y culturalmente.
Las actitudes innatas son aquellas que traemos al nacer; una de ellas y la más importante es el uso de la razón, esta nos posibilita pensar, entender y accionar sobre el terreno social en el que nos movemos. Este proceso convierte al individuo en un sujeto, ya que se comunica y copia acciones y gusto de los demás miembros de una sociedad. Esto se debe a que todo sujeto busca pertenecer, nadie quiere estar por afuera del sistema social.
El sujeto mediante la capacidad biológica de captar el entorno social mediante el uso de los sentidos recepciona y copiar costumbres, hábitos, creencias, etc. las cuales le permiten accionar y desarrollarse dentro del campo social. En función de esto es que podemos definirnos como sujetos, ya que siempre estamos atados a los imperativos sociales, siendo manipulados en nuestros gustos, costumbres, toma de decisiones, etc.
Por otro lado la razón nos permite desarrollar nuestro conocimiento, es aquí donde aparecen las capacidades adquiridas; estas demuestran el vinculo del ser con las acciones de las demás personas; es este proceso el que crea en los sujetos una ideología. Es a partir de dicho proceso que el individuo construye su identidad, permitiéndose cambiar de actitudes y posicionamientos políticos, religiosos, estéticos, etc.
Las formas de pensar y entender el mundo forman parte de lo que se denomina el campo práctico (Lugar donde los sujetos actúan o se desenvuelven) Este espacio es regulado y dirigido por los grupos de poder. Son estos lo que socializan al sujeto, le dan entidad, forma definida, desarrollo individual, el cual se caracteriza por su organización fragmentada, en términos económicos, de deseos, etc. dándole forma a un ser empatico, que todo el tiempo busca diferenciarse del otro, para incorporarse a donde él entiende están los de su clase o sector social.
Es por ello que podemos afirmar que el hombre se caracteriza por ejercer un poder con respecto a otro ser; y es que reconoce sus necesidades y actúa conforme a las actitudes y saberes que tiene. Pero también el ser es impulsado por sus frustraciones, desigualdades, cosmovisiones, emociones, sentimientos, etc. son estas las que los empuja a ser en tanto construcción de poder y dominación, por ello manipula y crea en el otro subjetividad o forma de pensar y actuar.
Conforme a esto estamos en condiciones de afirmar que los sujetos al nacer en una sociedad que ya tiene hábitos, costumbres, normas, leyes, etc. es que adquieren todo esto y conforman su propia ideología, la cual le permite insertarse dentro del ámbito social, lugar que se carateriza por la desigualdad entre pares; esto produce una lucha o enfrentamiento entre personas o grupos de sujetos, todos quieren tener poder sobre alguien, por eso construyen imaginarios sociales en el otro, manipulando sus creencias o formas de vida; la libertad del sujeto esta condicionada por los grupos de poder. este tipo de poder debe ser ejercido de una manera disimulada y poco visible, ya que el sujeto no debe darse cuenta que esta siendo sometido.
En síntesis decimos que se puede ser de dicha manera porque tenemos la disposición de pensar y actuare como queremos, pero son nuestras relaciones las que nos imponen costumbres, cultura e ideología, la cual es común a cada ser humano; sin embargo sucede hasta cierto limite, ya que en la sociedad podemos encontrar otros sujetos con distintas ideologías, deseos y necesidades, es esta diversidad la que le da forma al campo social.