miércoles, 13 de agosto de 2014

El Gusto de Dormir

Autor Gonzalo Rodriguez


A la hora de elegir un gusto me inclino por dormir, al cual lo relaciono plenamente con el descanso, este mismo lo logramos pudiendo habitualmente acostarnos una cierta cantidad de horas por día. Más allá de esto empece a comprender que tal gusto se puede deber a que ya se rompieron los parámetros de descanso habituales; esto se debe a que canalizamos en ese momento todo el desgaste producido durante todo el día. El cual se vio alterado en los últimos años, debido esto a una transformación cultural, ya que por ejemplo, no es lo mismo dormir en estos tiempos que hace 10 años atrás. 
Anteriormente la gente dormía mayor cantidad de horas por la noche, esto fue variando -entre otras cosas- por el ingreso de las nuevas tecnologías;  pues la aparición de la computadora, el celular, la televisión, internet y cualquier otro dispositivo electrónico, hizo que las personas utilizaran tales productos. esto primeramente achico las horas de sueños, seguidamente distorsiono los momentos que habitualmente usábamos para dormir. tal situación se sucede porque el hombre actual encuentra mayor cantidad de actividades para hacer, dado que estamos predispuestos para y pendientes de todos estos artefactos electronicos, son ellos los que alterar nuestras horas de sueños.
Y es que podemos estar hasta largas horas de la madrugada conectados a internet, conversando o viendo videos; de este modo los medios de comunicación nos permiten estar atentos a otras cosas, modificando nuestras horas de sueños. por otro lado está el flujo de información, las nuevas tecnologías le permiten al hombre incorporar mayor flujo de información. es decir, estamos recibiendo y procesando información todo el tiempo, por lo que nuestras mentes no descansan el tiempo necesario, obligándonos a descansar en horas no habituales. de esta manera empiezo a comprender porque me gusta tanto dormir, por ejemplo la siesta.
Además está la escuela; a dicha institución debo concurrir temprano a la mañana y te exigen que estudies y respondas ciertas cuestiones, por lo que se incorpora información a nuestro cerebro, lo que implica que hay un mayor desgaste, dado que primeramente nos acostamos tarde, nos levantamos temprano y generamos un desgaste profundo, haciendo que nuestro cuerpo no soporte tal proceso, debiendo si o si dormir una sienta.
También las personas tienen una mala organización del tiempo ¿Qué quiero decir con esto? que deberíamos organizarnos mejor y volver a designar horas para dormir, horas para estudiar y horas para divertirnos. de esta forma podríamos cumplir mejor con todas nuestras responsabilidades; ya que podríamos realizar cada cosa con su debido tiempo y así cumplir con tosas nuestras exigencias. Logrando nuestros objetivos, y es que dividir de manera consiente el tiempo representa descansar ordenadamente, recuperándonos tanto física como mentalmente.
De este modo podríamos utilizar las nuevas tecnologías tanto para el trabajo o para el estudio y no dejaríamos de cumplir con nuestras obligaciones, tampoco exigiríamos el cuerpo, y además descansaríamos en horarios habituales y no en cualquier hora. y es que tampoco nos damos cuenta que dormir en cualquier hora también implica alimentarnos mal.
otro factor que interactúa es el deseo de hacer las cosas correctamente, muchas veces deseamos y nos proponemos organizar nuestros tiempo, pero no lo podemos llevar a la vida diaria, caemos en los mismos hábitos; por lo que nunca encontramos un equilibrio que nos permita realizar organizada y consientemente nuestras actividades diarias.
El dormir también se ve relacionado con los diferentes sectores sociales. Esto quiere decir que una persona con pocos recursos económicos, perteneciente a una clase social baja debe trabajar muchas horas y en horarios inconstantes para ganar el dinero y vivir diariamente de manera digna, por lo que seguramente se verá alterado sus horas de descanso, ya que tiene que ganar dinero para sostener a su familia o a él mismo.
Una persona con una mejor posición económica tal vez pueda darse el lujo de descansar más y mejor, ya que no tiene necesidades incumplidas, un ejemplo un empresario no debe levantarse temprano para ir a trabajar, ya que seguramente el tiempo lo dispone él.
Mientras tanto los sectores sociales medios bajos trabajan una mayor cantidad de horas, por lo que su descanso es menor y el desgaste es mayor, por lo que nunca pueden estabilizarse física como mentalmente. Así el dormir yo lo relaciono con una idea particular, pero también cultural, pues se puede decir que cada persona o grupo social entiende las relaciones sociales desde una única perspectiva, de este modo dormir por ejemplo la sienta es por un lado una necesidad de nuestros tiempos, pero también es una perspectiva cultural, la cual se asemeja con un gusto positivo para el resto de la sociedad, todos vemos con buenos ojos el hecho de poder dormir una buena siesta. Por ello digo que tal acción forma parte de una cultura etnocentrista.  
Es por ello que las personas dicen que para estar bien descansado hay que dormir una buena siesta, eso hace que me guste dormir todas las tardes una buena siesta. Más allá de todo esto los nuevos tiempos deformaron el concepto de siesta, por lo que podríamos hablar de que la cultura de la siesta se transformo y no tiene un espacio y tiempo determinado, varió en todo concepto además en los diferentes lugares, por lo que adquiere su propia lógica, convirtiéndose en algo totalmente relativo;  por ello la idea de la siesta se adecua al lugares y tiempos determinados por las personas de dicho espacio, siendo ellos los que disponen cuanto dormir y en que momento dormir, ya que cada lugar tiene sus propios valores, normas, costumbres, etc.
En definitiva puedo decir que me gusta dormir porque primero que nada soy adolescente y joven, y nuestros ideales personales entienden que dormir la siestas esta más que bueno, segundo porque nos gusta estar frente a las nuevas tecnologías y tercero es porque pienso que cada persona va organizando su vida según sus necesidades y tiempo. por todo ello entiendo que no esta mal dormir, siempre y cuando busque como objetivo recomponernos diariamente. 
Correcciones: Prof.  Mereles Gabriel.




El Hombre Moderno y su Nueva Forma de Hacer Política


Autores: Estudiantes de 5° 2 de la Escuela Secundaria N° 2 de Presidente Perón.

El Hombre Moderno y su Nueva Forma de Hacer Política

La política moderna pensada por Nicolás Maquiavelo

Maquiavelo plantea que si el hombre es dejado en libertad abandonaría sus obligaciones, no trabajaría y tal vez robaría para sobrevivir; es por ese motivo que debe estar ordenado y determinado por una organización política. A este orden lo denomina Estado, es este el que tiene que coaptar la libertad de las demás personas, porque sino no habría orden social posible.
Esto permite pensar que la modernidad se caracteriza por la construcción de nuevas instituciones. Tales estamentos son creados y dominados por los ciudadanos; son estos los que pueden pensar, crear ideas y establecer leyes, las cuales apuntarían a consolidar un Estado soberano.
De esta forma vemos como dicha institución aparece como un sistema de imposición; ya que a través de las leyes se dice lo que se puede hacer y lo que no, por lo que se entiende que tal disposición no contempla las cuestiones particulares de las personas, sino que por el contrario somete a las masas sociales a un cierto tipos de lineamientos.
Es por ello que para el político moderno y la política moderna el poder se centraliza; para que esto se concrete el dirigente o líder político debe ser hábil         –dice Maquiavelo- tiene que saber negociar; pactar, hacer alianzas y utilizar la fuerza.

Y es que para Maquiavelo el hombre moderno se guía por lo que ve; adquiriendo una mirada superficial de la vida. Desea lo que posee el otro; y busca conseguirlo según las  herramientas que posee. Es decir, quien entiende que es más fácil engañar a la gente que trabajar lo hará y comprenderá que su relación social se sostiene en ese tipo de estrategia. Así el hombre para Maquiavelo y por sobre todo para la modernidad es malo por naturaleza, ya que es perverso, estratégico, intuitivo, egoísta, etc. Esto legitimaría su dominación y el surgimiento del Estado como órgano controlador, castigador y regulador de las relaciones sociales.
Maquiavelo plantea además que la sociedad moderna y más específicamente el hombre se mueve por necesidad, esto implica que hará lo que sea para satisfacer su deseo personal; pero ¿Por qué puede hacerlo? Esto se debe a que el campo social en el que se desarrolla el hombre, es un espacio donde convive una lucha de poder, que se caracteriza por ser desigual, siendo aquellos que reconocen su cuota de poder, quienes se sostienen en el mando, delegándolo o trasladándoselo a aquellas personas más allegadas.
A esto se le agrega que el hombre juzga y actúa según las apariencias, es decir, son los sentidos los que guían el saber y entender de las personas; no es la razón y la reflexión. Esto posibilita la apropiación del poder político, dado que el otro se muestra de una manera determinada, expresa discursos que se asocian más con lo que los demás quieren escuchar, que con los proyectos políticos que quieren poner en funcionamiento; por ello Maquiavelo plantea que el gobernante debe ser hábil como el zorro, pero valiente e intimidatorio como el león. Lo que en definitiva está queriendo decir es que el fin justifica los medios.
Esto implica que para el hombre moderno la política no es una cuestión ética. Todo vale mientras el fin sea mantener y construir poder. Por ello la reflexión final es que de nada vales atemorizarse y resignarse a que nada puede cambiar, pues el espíritu de la modernidad, también radica en la posibilidad de construir ideas, formas de gobiernos más integradores y justos, y es que el hombre ha tomado posesión del mundo, es él quien tiene que tener el valor de transformar la injusticia en justicia, la tiranía en democracia, la desigualdad en igualdad, dado que el hombre fue arrojado al mundo para vivir y transformarlo según su deseo, comprendiendo que lo suyo debe formar parte de un proyecto aun mayor, igualitario y comprensivo, solidario y por sobre todo humanitario.
Bibliografía:
Maquiavelo, Nicolás (2000) El Principe. Argentina. Longseller.