Primeramente hay que entender que los medios de comunicación masivos son los que informan, forman y entretienen a gran parte de nuestra población. Este proceso integra las etnias, sintiéndose identificadas en algo unas con respecto a las otras; esto sucede porque lo que se dice y hace dentro de una pantalla televisiva, encuentra un punto de encuentro entre las diferentes personas. De este modo las personas incluidas dentro de un sistema cultural diferente, reconocen en las caracterizaciones televisivas un punto de encuentro, unión y relación, asociando una cultura con la otra.
Las características se definen como especiales y diferentes debido a sus particularidades: lenguaje, religión, raza, etc. pero lo particular es que los une algo y ese algo es lo económico. Este se basa en la producción, distribución y consumo de bienes y servicios. Es este punto de contacto el que aprovecha el medios de comunicación. Es en función de comprender tal relación que decidimos analizar el programa de televisión Showmatch. Como ya dijimos su función es entretener, formar e informar a la sociedad sobre ciertos aspectos de la vida de consumo. Por ello el programa tiene una subdivisión, en ella aparece su segunda parte la de Bailando por un Sueño; esta idea pretende convencer la televidente de que se esta ayudando a quienes necesitan algo. El objetivo es tomar el espacio público, captar la atención de las personas, estructurar un sentir cultural y proyectarlo como acción política.
Y es que en lugar de relacionar personas que se sientan identificadas con el sueño, y desde allí proyectar una solución conjunta, el programa expresa una creación y una expresión de valores individuales y colectivos: individuales porque es una persona la que puede solucionar el problema, ya que esta baila para ganar el certamen; y colectiva porque apuntan a construir un imaginario social, el cual identifica al programa con la acción solidaria, conectando al programa con un supuesto compromiso social y político.
Es por ello que podemos afirmar que el programa tiene un público muy grande y es que hace uso de su impacto social, colectivo, proyectando un programa que adquiere una gran diversidad de actividades, logrando captar la atención de cientos de miles de personas cada noche. Además, la televisión entretiene, relaja y divierte, en este programa hay una serie de estrategias montadas, las que se desarrollan dentro del programa, mostrando por momentos bailes, imitaciones, chismerio, peleas y así muchas cosas más.
Todos estos espacios responden a una estrategia, el cual persigue un solo objetivo: tener "Reanting" Showmatch es un programa en el cual se transmite una información y una subinformación; esto quiere decir que hay una información base, la cual apunta a lo emotivo y sentimental, mientras que por otro lado se ofrece una subinformación, esta apunta a representar valores costumbres, formas de vida, creencias. Esto se logra porque la información que se brinda sobre algo nunca es suficiente, por ejemplo las peleas entre famosos nunca son reales, la discusión entre las parejas de baile resultan ser moneda corriente dentro del programa, etc. de este modo el televidente capta lo que ve, lo interpreta y lo transfiere al resto de la población como si este fuera un verdadero problema social.
Es por ello que hablamos de información y subinformación hay información concreta que es la actuasión de una supuesta pelea, la cual se maneja de manera ambigua, irresoluta, sirviendo esta como subinformación, o sea información incompleta, que moviliza acciones en las personas. Por otro parte la intromisión de la televisión en las vidas de las personas, permitió el predominio de la imagen; la cual modifica sustancialmente la naturaleza de la comunicación. Y es por eso que tenemos mayor facilidad de saber lo que pasa alrededor nuestro. A través de programas como Showmatch nos mantenemos informados de candidatos políticos, ideales sociales, necesidades generales, etc. Todo esto manipula dicho programa.
Por otro lado el programa plantea la participación activa de la población, ya que con su voto pueden decidir quien se queda y quien se va del programa. Esto también posibilita que la persona se sienta responsable en el cumplimiento de un sueño, lo cual es una verdadera mentira. La televisión y el programa de Tinelli se ha convertido en un instrumento de comunicación que genera nuevos tipo de ser humano, convirtiéndose la T.V. en la primer gran escuela, la escuela divertida, que se enfrenta a la otra escuela la aburrida, a la cual los jóvenes ya casi no quieren ni ir. Por otro lado el programa muestra una serie de imitaciones y shows, los cuales muchas veces tienen un fin político, ya que se promueven candidatos políticos.
Frente a este panorama podemos afirmar que las personas prefieren mirar dicho programa que leer un libro; ya no es habitual para las personas, pues los medios audiovisuales le permiten a las personas informarse, entender diferentes cosas, adquirir nuevos gustos y preferencias, saber sobre la vida intima de famosos, etc. Las imágenes emitidas por dicho programa no permite desarrollar la intelegibilidad de las personas, ya nada se explica en la sociedad del consuma y mucho menos en el programa Showmatch, el fin es divertirse, pasarla bien mediante la construcción de una serie de personajes, que utilizando formatos incoherentes y banales construyen un ámbito de diversión y entretenimiento.
En este programa no hay integración, ya que nadie tiene la capacidad de saber y comprender que rol o función están cumpliendo; no hay una sustracción, es decir, nadie se aparta para pensar lo que esta haciendo y a que esta contribuyendo. Es por ello que comprendemos que el programa va limitando la capacidad de compresión de las personas, quienes solamente observan de manera pasiva actos construidos y puestos en funcionamiento por una persona, para así construir una serie de imaginarios sociales, los cuales poco tienen que ver con la solidaridad, el esfuerzo personal y la creatividad artística.
Las personas comunes tendrían que entender que el divertimento puede llegar de otra manera, con otro formato, bajo otra lógica, obligando así a construir programas más creativos, críticos, que ayuden a las personas a pensar criticamente, pudiendo el ser convertirse en una persona reflexiva y comprometida con la realidad social.
Autores: Almiron Camila; Nicolás Comensoli y Rodrigo Morel.
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