Las estudiantes
Soto Angeles, Arce Milagros del 5 año "A" del Colegio Santa Rosa realizan una interesante reflexión sobre el por qué de la previa en los jóvenes.
La previa es vista por
los adolescentes y jóvenes adultos como una costumbre o “rito”, el cual se basa
en ingerir bebidas alcohólicas, en algunos casos incluso mezcladas con drogas,
antes de algún evento o salida. Debido al impacto que produce en las diferentes
comunidades, la previa, ha llegado a formar parte de la esencia de la juventud
moderna.
Pero, ¿Cómo llegamos a
incluir esta modalidad en nuestra cultura? ¿Qué o quién influye en estos
incentivos? El siguiente análisis se realizara con el objetivo de responder a
estas problemáticas, de acuerdo a las interpretaciones logradas con una serie
de teorías sociológicas.
Para
entender esta problemática hay que comprender las influencias económicas, son
estas las que generan incentivos, respondiendo a una lógica comercial, la cual
los jóvenes reproducen, satisfaciendo las necesidades de las industrias.
La
producción de este acto se basa en los intereses personales de los sectores
encargados de promover el consumo de alcohol, el fin es formar una
superestructura, estableciendo para ello parámetros culturales; promoviendo el
consumo de alcohol. Estas nuevas ideologías lo que producen es una
naturalización de esta costumbre, logrando nuevamente -como es característico
en la economía capitalista- que la balanza se incline favoreciendo al sistema
dejando a los consumidores en un estado
de enajenación, es decir que estos no sean conscientes de las estrategias y los
objetivos que se encuentran detrás de la comercialización de las bebidas; De
modo el ser in-consciente de lo que sucede, permite que la industria puede
volverse fácilmente ajena a las consecuencias que pueden llevarse a cabo por
sus propias estrategias, para aumentar la demanda y los ingresos.
La
Superestructura, nombrada anteriormente, es la herramienta fundamental en esta
influencia sobre los jóvenes, ya que lo que hacen estas es volcarse sobre los
medios de comunicación en forma de propagandas, publicando abiertamente una
imagen divertida y “positiva” sobre el consumo de las bebidas, excusando que
beber mejora cualquier situación. Un ejemplo que podemos dar son las
publicidades de Brahma, en ellas se da a entender que la inmadurez e irresponsabilidad
es algo natural a pesar de ser un sujeto adulto, remarcando que lo mejor forma
de solucionar los problemas de esta etapa de la vida se encuentra en una
botella de esta cerveza.
Otro
dato a tener en cuenta, sobre la enajenación, es la forma en la que el sistema
se las ingenia para ingresar en sus propagandas las advertencias obligatorias
que exigen las leyes de modo que pasen inadvertidas, y no opaquen el mensaje
consumista.
Pasando
al sector social, podemos ver otro tipo de influencias e incentivos que así
como en el caso del capitalismo y las industrias también normaliza dicha
modalidad, y hasta se llega a tomar como una condición para formar parte de la
juventud.
Los
factores influyentes en este caso es la naturaleza humana, en cada persona
existe lo que se denomina deseo, esto es propio de cada ser humano, es esto lo
que moviliza y estimula al ser, de ahí parten los intereses, dandole forma a lo
que sería la previa. Está práctica social,
es una manifestación del individuo, el que toma forma dentro del ámbito social,
logrando de este modo el surgimiento del accionar cotidiano de la previa.
Para
entender el rol de estos factores nos centraremos en analizar un grupo de
individuos. Primero están los seres superiores, estos son personas capaces de
consolidar ideales, generan acciones de deseos en los jóvenes, impulsándolos al
consumo de alcohol; por otro lado están los jóvenes estos reproducen junto a
los demás miembros dicha práctica, planteando, formando y consolidando
costumbres y hábitos dentro de esta sociedad, caracterizándola, como importante
y prioritario; Es acá donde aparece dicha acción como un hecho social y es que
la previa llega más allá de un hábito, adquiere un sentido moral. Los jóvenes son coactados y limitados
por este hecho social, lo entienden como algo propio de su edad, transformándose
en un deseo, no deseando negarse al consumo de alcohol.
El
acto moral de la participación de las previas hace referencia a una condición
para formar parte del grupo. Si un sujeto se revela contra estas condiciones se
lo comienza a tratar como un ser anómalo, diferente y raro, y se lo excluye del
grupo.
Se
podría decir que el miedo al rechazo es también un factor influyente, debido a
que al no querer ser excluido del círculo social, ni discriminado por sus
pares, el individuo tiende a volverse flexible y, de una forma u otra, termina
adoptando la modalidad, y, en consecuencia, participa en estos eventos
sociales.
El
miedo al rechazo, el deseo de ser aceptados y la necesidad de pertenecer a un
grupo social son claras consecuencias de los efectos de la naturaleza humana en
los jóvenes y, a su vez las razones del sobre la expansión de la previa dentro de
la esencia de los adolescentes.
En
síntesis, en base a lo desarrollado y analizado anteriormente podemos decir que
económicamente la previa forma parte de la cultura juvenil; son los mensajes
consumistas que distribuyen las grandes empresas, que explotan una imagen
divertida e irreal con el fin de obtener beneficios, a coste de las consecuencias
que pueden producirse. Es este proceso el que hace que socialmente el hábito de
la ingesta de alcohol se naturaliza dentro de los grupos de jóvenes, debido a
los impulsos que produce la naturaleza humana sobre los deseos de los jóvenes, así
también como el miedo al rechazo y la necesidad que poseen de ser miembros de
una comunidad donde se sientan iguales con sus pares sin ser discriminados.